Un nuevo escándalo se vivió esta tarde en el Philips Stadion cuando se disputaban los últimos minutos del partido entre PSV y Sevilla.
El arquero del equipo español Marko Dmitrovic, recibió una agresión de un aficionado del PSV debido a que se mostraba molesto por la eliminación de su equipo. El hincha saltó al campo para darle un golpe, pero el portero tuvo reacción para esquivar y luego redujo al hincha hasta que llegara la seguridad del estadio.
“Un aficionado me empujó desde atrás. Imagino que estaba enfadado por el resultado de su equipo, imagino que también un poco alocado o borracho. Me empujó y lo paré hasta que llegó la seguridad. Tenía bronca en mi cuerpo pero esas cosas no pueden pasar y espero que sean castigados”, comentó el arquero en los medios oficiales del club.
Y agregó: “Me voy a callar por no decir lo que de verdad quería hacerle. Afortunadamente, me alegro de haber sido consciente de dónde estaba y haberle reducido”.
Este es un nuevo caso de agresión a un jugador, similar a lo que sucedió hace unos días en el fútbol colombiano en Ibagué, cuando Daniel Cataño fue golpeado por un seguidor de Deportes Tolima.