Atlético Nacional debe pagar 5 millones de dólares a Cortuluá por el fichaje de Fernando Uribe en 2012 tras la decisión del Tribunal del Estatuto del Jugador.
A raíz de esta situación, Óscar Ignacio Martán, máximo dirigente del Cortuluá, instauró una denuncia en la Fiscalía General de la Nación por amenazas de muerte, producto del conflicto que tiene con el equipo antioqueño.
En entrevista para Blu Radio, Martán contó que «un señor le dijo a mi hijo que había una comitiva, un grupo armado, que iba a atentar contra mí, que iba a hacerme seguimiento, porque yo estaba robando a Atlético Nacional«.
Además, comentó que desde hace ocho años, siempre ha recibido comentarios fuertes en redes sociales, pero en esta ocasión tuvo que retirarse de Twitter e Instagram por continuas amenazas.
Por ahora, Martán descartó contratar escoltas y manifestó que envió esa información a los presidentes de la Federación Colombiana de Fútbol, Dimayor e, incluso, al mismo Atlético Nacional.
Es importante recordar que si Nacional no paga la suma que debe, el equipo ‘verdolaga’ no podrá inscribir a sus nuevos jugadores este semestre.