Por: Juan Pablo Tabares Ortega
Si hay algún candidato al Concejo de La Ceja que apoye desinteresadamente el deporte y a todas las personas que practican actividad física, ese es Wilder Castro. Con varios años al servicio de la comunidad y siempre dispuesto a ayudar a quien lo necesita, este licenciado en Educación Física aspira estar nuevamente en la corporación para continuar fortaleciendo el ámbito deportivo en un municipio que es potencia en diferentes disciplinas.
Wilder, hijo de padre floricultor y taxista, y de madre ama de casa, siempre ha estado ligado al deporte y la educación, dos herramientas fundamentales para generar tejido social, elaborar proyectos de vida y, sobretodo, es fundamental para alejar a los jóvenes de la delincuencia, la deserción escolar y otras problemáticas que hoy en día aquejan a La Ceja.
“Desde el colegio fui muy inquieto por el deporte, me metía a todo, y por eso sé que si un chico está vinculado al ámbito deportivo va a ser alguien responsable y va a construir buenas amistades”, expresa Wilder Castro, quien comenzó su formación académica en la Institución Educativa Justo Pastor Mejía y se graduó como bachiller en la I.E. Bernardo Uribe Londoño.
Su pasión por el deporte lo llevó a estudiar licenciatura en Educación Física en la Universidad de Antioquia y, a su vez, combinaba sus estudios con el servicio de transporte público. “Cuando mi padre tenía el taxi, yo lo sacaba en la noche para costearme mi carrera profesional y ayudar en la casa”, agrega el hoy concejal de La Ceja, quien inició en la política porque soñaba con ser el vocero de los deportistas.
Precisamente, en su primer periodo como corporado, Wilder sacó adelante proyectos como el subsidio de transporte para quienes necesitaran viajar a otros lugares a disputar alguna competencia y fue artífice de la Copa de la Vida, un torneo que los jóvenes del municipio jugaron en las calles de cada barrio, que integró a la familias y que espera ser replicado en los próximos años.
“Nosotros invitamos a los chicos de las esquinas a practicar deporte, tocamos las puertas y les dimos uniforme, premiación, y cuando terminó el torneo buscamos apadrinamiento en varios clubes, que es algo muy importante porque hay niños y jóvenes que no tiene capacidad de pago y en muchas condiciones deben abandonar”, agregó Castro, quien también ha realizado actividades en beneficio de la cárcel, el asilo, la Fundación El Maná, y otras instituciones.
Hoy La Ceja cuenta con infraestructura muy bien dotada; sin embargo, según Wilder, aún falta la piscina pública, una pista atlética, un coliseo de combate y una pista de patinaje, sumado a otras gestiones que él quiere seguir realizando en beneficio del deporte. Por eso, este 27 de octubre sueña con ser elegido nuevamente concejal y para lograrlo cuenta con el apoyo de los cejeños, su familia, sus amigos y, por supuesto, su hijo Maximiliano quien es su principal motor.
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